Agricultor por herencia y trabajo tesonero, él Profesor Primario, que encabeza este acápite, es un hombre sumamente trabajador y honorable; posee vasta inteligencia y cultura general; constante, de porfiada tenacidad, ha sabido llegar a donde él quería, siguiendo la ruta que le trazaran sus mayores.
Serio y reticente; locuaz cuando está contento, no se fía fácilmente de la gente, pues tiene ya mucha experiencia por los casos que le han pasado, sobre todo en asuntos de herencia.
Fue Director de la Escuela de Los Alamos durante muchos años y con paciencia de franciscano, venía a Butamalal, su hermoso fundo, a trabajar duro y parejo, ejemplar familiar, bueno con sus alumnos y con sus subalternos, lleva esa misma política en su propiedad rural, considera a sus obreros como debe ser: sus colaboradores; cuando hay que madrugar, él da el ejemplo levantándose al clarear el día y poniéndole el hombro al trabajo; lo he visto personalmente en tiempos de cosechas de trigos y avenas.
Sus sembrados y plantaciones en general, son dignas de admirar en su fundo, que ya es ceja de montaña; lo considero un verdadero oasis en medio de esas serranías.
Costó mucho trabajo para que se resolviera a aceptar la dirección de la Escuela Granja de Cañete, que se ubicó en el fundo Santa Clara, me tocó ser miembro de la comisión de tasadores y trabajar duro y parejo cuando fui Presidente de la Asamblea Radical porque se comprara dicho predio; claro que yo quería se instalara ahí una estación de montas, de vacunos y caballares (esto le da mucha tentación de risa a Tito Araneda); pero sólo se ha hecho Escuela Granja, que ya ha dado sazonados frutos por los alumnos que se han titulado. Otra gran cualidad don Eliecer ha sido el de saber escoger a sus directos colaboradores; me complazco en reconocerles espíritu de sacrificio, desinterés por las comodidades y gran alma de apóstoles y muy buena capacidad para enseñar.
Cuando no había ni un arado, ni un animal, don Eliecer trajo desde su fundo todo apero y empezó a trabajar en la Escuela Granja; ¿quién le ha agradecido? Pero él está con su corazón rebosante de alegría, por haber hecho un bien, sana aspiración de todo corazón bien puesto.
